sábado, 14 de noviembre de 2009


El mañana nunca llega

Si te tomas la vida como algo sencillo, si se torna satisfactoria, poco a poco, lo mismo pasará con tu muerte. ¿Qué estamos haciendo? No estamos disfrutando de la vida; sólo nos estamos preparando para disfrutarla. Y la vida es aquí y ahora; no se necesita preparación alguna. Veo gente que siempre se está preparando para tener una gran vida en algún lugar en el futuro. Tendrán miedo a la muerte, pues en el futuro espera la muerte. Y tu vida también está en el futuro: te estás construyendo una casa, o te estás comprando un auto, y esto y aquello, acumulando cosas; simplemente, preparándote para vivir. Nunca estarás preparado y, en el momento en que lo estés, la muerte golpeará a tu puerta. Ese es el temor, que "la muerte pueda llegar antes de que estés preparado".

Un hombre con capacidad de discernimiento vive la vida aquí y ahora; la vive en cada momento. Para él, no hay muerte, porque no hay vida futura. Él agota el momento, lo vive completamente, lo disfruta, está agradecido. ¿Dónde está el temor a la muerte, si en este momento estás vivo? No intentes estar preparado para morir; sólo vive. Y te digo que todos, tal como somos, estamos preparados para vivir el momento presente.

Recuérdalo: no pospongas, no dejes las cosas para mañana. Aquí y ahora, está todo lo que necesitas. Disfrútalo y, cuanto más lo disfrutes, más te será dado. Eso quiso decir Jesús cuando afirmó que, si golpeas, la puerta se te abrirá; si pides, te será dada. En este momento, la puerta está allí. ¡Pide, golpea, vive! No lo dejes para después.

Ese es todo el mensaje de los que han tomado consciencia: alcanza con hoy; el mañana se ocupará de sí mismo. Y el mañana no llega nunca; siempre es hoy. Si conoces el arte de vivir aquí y ahora, podrás vivir cada momento cuando llegue. Incluso en el momento de la muerte, podrás vivir. Y, si puedes vivir el momento de tu muerte, ¿cómo puedes morir? Entonces, también transformas tu muerte en vida.

Osho