miércoles, 28 de julio de 2010

Meditar para Sanar


La mayoría de las personas experimentan altos niveles de estrés a lo largo del día, nuestro organismo reacciona de forma automática ante diversas situaciones que se nos presentan y nos preparan para “luchar o correr”, lo cual en la mayoría de los casos sobre todo en situaciones de peligro extremo esto pudiera ser beneficioso y totalmente acorde con nuestro instinto básico de supervivencia. Sin embargo el mantener ese estado de agitación de forma prolongada pudiera causar daños físicos en diferentes partes de nuestro organismo.

La meditación tiene un efecto totalmente contrario al que produce el estrés, la misma restaura el estado de calma en nuestro organismo ayudándolo a repararse a si mismo y evitando mayores daños ocasionados por el estrés. Cuando la práctica su respiración y los latidos de su corazón se vuelven más pausados, causando que su presión arterial se normalice, además las glándulas suprarrenales o glándulas adrenales producen menos cortisona una de las hormonas del estrés, su cerebro envejece más lentamente y las funciones inmunológicas del cuerpo mejoran considerablemente.

La práctica de la meditación también ayuda a aclara la mente incrementando la creatividad y el insight. Las personas que meditan regularmente han demostrado mayor facilidad en abandonar hábitos nocivos para la salud como el cigarrillo, el alcohol, las drogas, etc.

Por supuesto que la meditación requiere práctica y paciencia además de disciplina y compromiso de su parte, para algunas personas pudiera ser difícil al principio el crear el hábito de la meditación por lo que muchos abandonan después de dos o tres sesiones. Sin embargo si sigue estos simples consejos aumentará considerablemente sus probabilidades de éxito en esta maravillosa práctica.

Consejos para practicar meditación

A pesar de que muchas personas intentan comenzar con la práctica de la meditación en algún punto de sus vidas, solo un muy pequeño porcentaje persiste en la misma. Esto es realmente muy desafortunado ya que los beneficios que podemos obtener de la meditación son realmente enormes.

Entre otras muchas, una de las razones de más peso por lo que esto sucede, es que muchos principiantes no comienzan con la actitud mental apropiada para hacer de la meditación una práctica sostenida en sus vidas.

El propósito de este artículo es ayudar a los principiantes, proporcionándole recomendaciones practicas para que puedan superar las fases iniciales e integrar la meditación como una constante en sus vidas.

- Haga de la meditación una práctica formal. Si desea realmente obtener todos los beneficios que la meditación puede ofrecerle, debe comenzar por tomárselo en serio y apartar un tiempo especifico del día para destinarlo a la práctica de la meditación.

- Solo medite por tanto tiempo como pueda disfrutarlo. La meditación debe ser algo que disfrutamos y no una tarea más.

- Seleccione un lugar específico en su hogar para la meditación. Este debería ser un lugar que no tenga mucha actividad en otras ocasiones.

- Asegúrese que su tiempo de meditación es respetado.

- Tenga muy clara cual es su motivación para comenzar a meditar. Cuando entiende claramente cuales son sus razones y objetivos para comenzar a meditar, le será más fácil encontrar una práctica o técnica que funcione para usted y su situación particular.

- Seleccione alguna técnica en particular y comprométase a seguirla por un periodo determinado de tiempo.

- Obtenga educación y conocimientos del área. La confusión y los malos entendidos por lo general se generan debido a la falta de conocimiento. Encuentre un buen maestro, o alguna comunidad en línea donde pueda encontrar respuestas. Lea libros sobre meditación y prácticas espirituales.

- Sea honesto con usted mismo.