Los problemas no están para aplastarnos, sino para poner a prueba nuestra capacidad de superación. Y si no ensayamos continuamente las formas de salir adelante, aún en las peores circunstancias, el miedo será cada vez mayor y la desconfianza en uno mismo crecerá proporcionalmente. Todo problema tiene solución y hay que encontrarla. Lo que no se puede pretender es una solución perfecta ni definitiva. Lo perfecto y lo definitivo no son plantas de este mundo. Hay soluciones más o menos buenas que sirven para poder continuar con la marcha; más adelante podrán mejorarse o podrán variarse en la medida en que aparezcan nuevos problemas, cosa inevitable en la Escuela de la Vida. Pero hay que probar, hay que usar las propias fuerzas, hay que atreverse a empezar y no echarse atrás ante los fracasos. Como todo lo que implica aprendizaje, hacen falta ensayos, errores y correcciones. ¡Pero cuánto más tranquilizador es sentir que podemos, que esos pequeños poderes que dormían en el interior, empiezan a manifestarse! ¡Yo puedo, yo puedo!, es algo que debemos repetirnos continuamente para dar salida a las naturales potencias humanas. |
ISIS, Guardiana y Diosa de la magia; la esposa y la gran madre, protectora de la maternidad, de los niños y de la familia...